La académica de la carrera de Diseño de Vestuario y Textil, Gabriela Beaumont, señaló que “es muy importante leer las etiquetas internas, poca gente lo hace y sigue las instrucciones, ahí dice si se puede o no meter a la lavadora, que detergente no usar, secadora, etcétera”.
La académica de Diseño de Vestuario y Textil de la Universidad Andrés Bello (UNAB), Gabriela Beaumont, abordó la posibilidad de darle una segunda vida a aquella ropa que está olvidada en el clóset, quizás sin uso, o con hoyos o desgastada.
Sobre cómo reutilizar esa ropa que ya no usarás y que tienes tirada en casa, Beaumont manifestó que “existen variadas formas para conseguirlo, una de ellas es la reventa, armar una pequeña colección con tus prendas y por medio de una red social ponerlas a la venta o hacer trueque por otras nuevas”.
Agregó que “también existe la intervención de las prendas, si no te quieres deshacer de ellas puedes transformarlas en otras, sacando partes, agregando, tiñendo, poniendo aplicaciones”.
Recalcó además que “incluso si no la quieres dejar como ropa, la puedes transformar en otra cosa, un bototo puede ser un macetero de planta, varios jeans unidos pueden ser el tapiz de un sillón, etc. Esto está en tendencia con la sustentabilidad”.
Frente la ropa en mal estado, la académica de Vestuario y Textil de la UNAB enfatizó que “hay prendas que se pueden reparar, sobre todo si elegimos materiales de buena calidad, como el cuero por ejemplo, el calzado, la lana se puede cocer con técnicas milenarias”.
Añadió que “hay técnicas para revivir y dejar como nuevos muchos materiales textiles, pero deben ser de buena calidad. Las prendas del fast fashion al ser de mala calidad están pensadas en ser desechables, en ese caso si ya no tienen posibilidad de uso pueden ser buenos rellenos de cojines por ejemplo”.
Beaumont además entregó sus mejores tips para prolongar la vida de esa ropa que es nuestra favorita y que se ha deteriorado producto de los lavados.
“Es muy importante leer las etiquetas internas, poca gente lo hace y sigue las instrucciones, ahí dice si se puede o no meter a la lavadora, que detergente no usar, secadora, etc. Lo primero es ver esas instrucciones”, dijo.
Por su lado, apuntó que “lo mejor para prolongar la vida es cuidar el lavado y el secado. Luego nuevamente sugiero elegir mejores materiales que son más durables, si bien algunos son más delicados, su calidad los perdura en el tiempo. Los jeans por ejemplo no deben lavarse muy seguido, no lavarlos después de cada uso, si no que como es
una tela resistente lo puedes hacer con mucho menos frecuencia. Así no se gastan ni se rompen y ayudas al ahorro del agua”.