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La prensa nacional estaba expectante a la espera de que este jueves 20 de mayo, ad portas del fin de semana largo, el Presidente Piñera hiciera un nuevo cambio de gabinete, pero este no sucedió.

Según fuentes de La Moneda todo indica que este ajuste o se hace durante el fin de semana o el mismo lunes, pero sería un hecho a pesar que existen voces en la centro derecha que han sugerido no hacer ningún ajuste, debido a que esto sería irrelevante, como lo menciona el Senador Manuel José Ossandón.

LOS CAMBIOS QUE MÁS SUENAN

La salida de Karla Rubilar del Ministerio de Desarrollo Social es una de las cartas fijas según los trascendidos de prensa, la que sería reemplazada por Rodrigo Delgado quien no ha podido resaltar en la cartera de Interior.

Justamente para esta cartera el nombre de Andres Allamand, hoy en el Ministerio de Relaciones Exteriores sería el que más se podría ajustar y así además realizar un gesto a Renovación Nacional.

Otra opción es que la cartera de Interior sea ocupada por Jaime Bellolio y que Katherine Martorell podría llegar a la vocería, sin embargo el primero de ellos no tendría ganas de cambiarse por nada del mundo de aquella cartera.

El otro nombre que suena podría incorporarse a un cargo de gobierno es el del derrotado alcalde de Santiago Felipe Alessandri, pero luego de conocerse que va en la lista de Desbordes en la elección interna de Renovación Nacional sus bonos habrían caído.

EL SEGUNDO PISO

Uno de los cambios que podría realizarse en este cambio de gabinete sería la salida de Cristián Larroulet quien este jueves al mediodía le habría comunicado al Presidente que ponía su cargo a disposición.

Pese a ello se conoció en el entorno del hombre fuerte del segundo piso que él sigue cumpliendo sus funciones normalmente pese a las diferencias que habría tenido con el mandatario luego de la salida de Sebastián Villarreal y la llegada de Andrea Balladares a la cartera de la cuestionada Rubilar.

Larroulet sindicado como el principal asesor de Piñera podría descongestionar el tenso ambiente que provoca su presencia en el Gobierno y sería el más radical cambio de concretarse el décimo ajuste que el Presidente realizaría a solo meses de una nueva elección presidencial y a días de una de las elecciones con más malos resultados de la centro derecha.

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