La relevancia del Consejo Fiscal del SII para una gestión tributaria más robusta

Escuchar el artículo

La reciente creación de un consejo de Gobierno Corporativo en el Servicio de Impuestos Internos (SII), como parte de la Ley Antievasión, representa un paso relevante en el fortalecimiento del sistema tributario chileno. Puesto que, antes de su creación, el poder tributario estaba fundamentalmente concentrado en la figura del Director Nacional del SII. Por tanto, este nuevo órgano no solo busca reforzar la transparencia en la gestión fiscal, sino también dotar de mayor efectividad a las decisiones estratégicas en la lucha contra la evasión y elusión tributaria. 

En su esencia, el consejo fiscal emerge como una herramienta para modernizar la estructura del SII, permitiendo centralizar decisiones clave sobre fiscalización, interpretación normativa y supervisión de contribuyentes con mayor riesgo de incumplimiento. Este enfoque sistemático y coordinado es particularmente relevante en un contexto donde la ciudadanía exige no solo rigor en la recaudación, sino también eficiencia en el uso de los recursos públicos. 

Existe amplia evidencia de la importancia de un buen Gobierno Corporativo como herramienta para mejorar la gestión, tanto de empresas privadas, como de organizaciones gubernamentales, como el SII. Sin embargo, para que esta medida alcance su máximo potencial, será determinante asegurar la independencia del consejo y su conformación por expertos con alta capacidad técnica. Solo así se podrá evitar cualquier percepción de arbitrariedad o interferencia política, garantizando que sus resoluciones sean percibidas como justas y basadas en criterios objetivos. 

Sin embargo, no debemos ignorar los retos que plantea esta iniciativa. La creación de nuevos órganos implica costos operativos adicionales y la necesidad de coordinar su labor con las áreas existentes del SII. En un escenario de alta presión por parte de la ciudadanía para mejorar la eficiencia del Estado, el éxito del consejo dependerá en gran medida de su capacidad para operar de manera sostenible y transparente. 

Este avance no es solo técnico, sino también simbólico y político. Refleja un compromiso renovado por parte del SII hacia un modelo de gobernanza más robusto, orientado a combatir la evasión fiscal y construir confianza en el sistema tributario. El desafío será convertir esta innovación institucional en un referente de buen gobierno corporativo, capaz de demostrar que la modernización del aparato estatal no solo es posible, sino necesaria. 

En síntesis, el consejo fiscal del SII tiene el potencial de marcar un antes y un después en la administración tributaria chilena. Sin embargo, como con toda reforma estructural, su éxito dependerá de su implementación y de su capacidad para responder a las expectativas de un país que clama por justicia y eficiencia tributaria. 

 

Ir al contenido Hide picture